Un día mi hermana Maite, la pequeña de mis diez hermanos, vino toda ilusionada con un aguacate como regalo para mi hijo Ignacio, ¡había conseguido que le brotaran sus primeras hojas! ¡Era una de las cosas mas bonitas que yo había visto! Buscamos una gran maceta y lo plantamos, tenía unas hojas grandes y armoniosas, y aunque era para Ignacio, yo pensé este va a ser mi árbol preferido. Han pasado algunos años, y ahora es un arbolito precioso, con unas grandes hojas; yo no se si dará alguna vez frutos, pero el verlo tan bonito es para mi un motivo de alegría, pues siempre me recordará la ilusión de mi hermana, sus ganas de vivir y la fuerza de su carácter. Y cuando salgo a la terraza, donde se ve el mar de mi Málaga, lo miro, sonrío y pienso: no son las cosas en si las que las hace especiales sino el cariño que ponemos al hacerlas lo que queda en el corazón y lo que nos hace sentir tan bien.
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Hola hermanita. Te puedo contar la historia de aquel hueso. Hablando con un compañero del trabajo me comento que el aguacate era muy bueno para la memoria (lo que ha sido siempre mi handicap) y que si se tomaba con moderacion se salvaba el escollo de el sabido " engorda un monton" (problema de todas las mujeres). La verdad que esta muy bueno y sabroso. Asi que compre un par de aguacates, me los comi y guarde el hueso.
ResponderEliminarCoji un tarro de cristal le eche un poco de agua y lo deje al sol, junto con otro hueso de mango. Al tiempo vi como el hueso se abria y salian pequeñas ramitas de él. Ambos crecieron juntos el aguacate y el mango y se hicieron pequeños arbolitos. Entonces pense en mi sobrino Ignacio y quise que lo cuidara él. ¿Porque? porque a veces pensamos que es dificil o casi imposible lograr metas que nos parecen inalcanzables y nos damos por vencidos antes de ni siquiera intentarlo. ¿Como va a brotar un hueso en agua? Pues brotó, y no solo brotó sino que se convirtió en arbol que todavia crece y crece, y permanece con él y contigo.
Nada es imposible, solo es inalcanzable lo que no se desea, se busca y se intenta.
El NO siempre lo tenemos de antemano, pero el SI es algo que depende de nosotros, solo hace falta tener confianza y saber darle tiempo, saber esperar. Y si no lo logramos al menos no sera por no haberlo intentado.